Cada período de tiempo tiene su tipo de hombres y de mujeres nuevos. Y estos, a su vez, incentivan el tipo del tiempo en el que viven.
La dictadura creó paraguayos con miedo, sometidos, callados. Todos “en silencio y con orden” como se está en los cementerios”.
Lleva dos años comenzando un Proceso de Cambio. Poco tiempo aún para que nazca el hombre y la mujer nuevos completos. Pero ya hay rasgos de el.
“Ahora la gente no se calla, exige los que son sus derechos”. “Ya tenemos cosas irreversibles a las que no vamos a renunciar”. “Son demasiados Contreras y se oponen sin razón a todo lo de Lugo”. Es conveniente que quieran lo mismo el Gobierno y el Intendente de Asunción. Así se unirán los esfuerzos”. “Vendí mi voto. Luego, recapacité y voté a conciencia”.
Por ejemplo, una cierta determinada conciencia despierta ciudadana. Hay pensamiento que antes ni se nos ocurrían. Y cuando esto sucedía, no nos atrevíamos a decirlos públicamente. Van arraigándose ideas propias expresión de sueños que comienzan a vivirse.
Ojalá que las Iglesias, los profesionales, la familia, se tomaran en serio estos nacimientos de hombre y mujeres nuevos. Es uno de los mejores aportes al Cambio.
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