Desde hace 14 años Mil Solidarios está trabajando con jóvenes
del bañado Sur. Actualmente en Asunción y Santa María son 870.
Desde séptimo grado hasta tercero de la media en la sede de
Solidario Rape asisten 470 alumnos más otros 120 en la sede del CAFA. El resto son
madres jóvenes, muchas
madres solteras, que después de haber interrumpido sus estudios por la
maternidad varios años, los han recobrado en el turno de noche.
Todos vienen tres mañanas o tardes para recibir formación múltiple y apoyo
escolar en horarios contrapuestos a sus escuelas o colegios.
Son bañadenses y la inundación creciente que sufrimos les
está golpeando fuerte. La mayoría ya están en los campamentos.
En Asunción aún no
se declara la emergencia, pero Mil Solidarios sí la ha declarado.
A partir de esta semana se ha achicado el horario de estudio
haciendo las clases más intensas.
Se están preparando duchas con agua caliente porque en los
campamentos es difícil este aseo. Comenzará una comida diaria para aquellas
familias que no los puedan alimentar bien.
Y todo esto está a cargo del equipo de profesores, psicólogos, trabajadores
sociales y personales de servicio divididos en diversos grupos.
En Solidario Rape, organización de las duchas y comidas.
En los campamentos, encargados de buscar insumos para las ollas populares y monitorearlas;
búsqueda y entre de ropas de abrigos; búsqueda y entrega de materiales de
construcción para completa los que faltan a algunas familias; ayuda a las
familias en completar las casas; ofrecer animación con los mismos damnificados.
¿Por qué narro todo esto?
Porque, aunque a nosotros nos toca directamente por ser bañadenses, esta inundación que está
dañando a muchos miles de asuncenos,
también tiene que estar presente, en su información y acción, en los otros
centros educativos.
Desde pequeños han de saber reaccionar nuestros jóvenes con solidaridad. Y lo
dejo a su imaginación y humanidad.
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