EL PARAGUAY, UN PAÍS EN MARCHA

Por Pa'i Oliva

Un momento histórico

El Paraguay está viviendo actualmente un periodo muy importante de su historia. Con las elecciones del año 2008 se le abrió una puerta al futuro que si sabemos aprovecharla puede ser el inicio de un proceso de cambio para mejorar el país. Una mayoría grande votó por Fernando Lugo con lo cual consiguió cortar los sesenta años de predominio del Partido Colorado. Lamentablemente el no habernos puesto de acuerdo en la lista de Senadores y Diputados le privó al nuevo Presidente de tener la mayoría necesaria en el Congreso de la Nación. Lo cual es muy importante en un País como el nuestro que oscila en su estructura democrática entre el parlamentarismo y el presidencialismo.

La pregunta clave que nos hacemos ahora es si ha habido avances durante este periodo de dos años. Y, cierto, que hay fundamentos para decir que sí los ha habido, principalmente, en los que se refiere a los sectores que permanentemente estaban excluidos por el Estado.

Estos avances, con sus limitaciones, son fruto de la lucha de un largo proceso durante la dictadura y los diecinueve años de pseudos transición. Y ciertamente todavía hay muchos obstáculos que siguen impidiendo la verdadera transición, que comenzó con la elección del Presidente Lugo. Uno de ellos es el no tener mayoría en el Congreso. Pero el más grande son los miles de ciudadanos que apoyando a su partido ANR hacen todo lo posible desde sus puestos de trabajo en los ministerios para frenar el proceso, apoyados por Medios de Comunicación, cuyos dueños tienen miedo a que se abra en el Paraguay un proceso de socialización.

A favor y en contra del Cambio

En apoyo al proceso iniciado sigue existiendo una mayoría. Pero como con dos velocidades.

La velocidad de los que están comprometidos con el Cambio como único medio para que el país salga del pozo donde lo habían arrojado. Y la velocidad de los que a lo largo de estos dos años han abierto los ojos. No estarán de acuerdo con lo realizado, pero tampoco quieren volver al pasado.

En contra sigue actuando los dos partidos de oposición que con su comportamiento irracional y poco patriota han querido impedir el avance del proceso, por ejemplo, no dándole el presupuesto necesario desde el Congreso. Además, desgraciadamente, una parte de la sociedad civil por su fanatismo partidario o su ignorancia todavía prefiere el tener un gobierno dictatorial a uno democrático. Y todo ello es herencia de los años pasados y de que la dictadura, y su continuación disimilada, se haya prolongado tantos años

Como puntos destacados de estos dos años del Gobierno de Fernando Lugo podemos citar: el campo de la salud, puesta gratuitamente al alcance d e la ciudadanía; los esfuerzos para lograr mejores condiciones abriendo algunas claúsulas del Tratado de Itaipú; la ayuda alimentaria del Proyecto Teko Pora condicionada a la escolarización de los hijos y al cuidado en la salud; las mejoras en la educación; los días de Gobierno del Presidente por todo el País, de donde salen soluciones para los problemas locales; la lucha abierta a la corrupción etc…. Y no nos olvidamos que el haber cortado los 60 años de gobierno del Partido Colorado ya fue, quizás, la hazaña mayor política de estos últimos años.

Todo lo anterior demuestra que el Gobierno de Fernando Lugo, aun con todos los impedimentos que el Gobierno está encontrando, internos en la oposición y externos en los países vecinos y crisis mundial, tiene una voluntad necesaria de llevar adelante los proyectos que benefician al Paraguay. Lastimosamente no se ha encarado en serio todavía una Reforma Agraria Integral que además de unir el interior con las ciudades hubiera sido un motor económico dándole valor añadido a lo producido en nuestros campos con la creación de nuevas fábricas, etc…

La hora de la juventud

Siendo el Paraguay demográficamente un país joven con uno de los índices de natalidad mayores de América, el protagonismo de los jóvenes todavía no podemos decir que ha alcanzado el grado y la importancia que ya se merece por su número y sobre todoporsu calidad.. Sin embargo la juventud paraguaya ha estado siempre presente en momentos claves, por ejemplo el Marzo Paraguayo. Día a día crecen las organizaciones de jóvenes y poco a poco estos se van convenciendo de que su presencia en la política como sociedad civil o como partido político es la condición necesaria para el Cambio. En la Universidad del Paraguay, sin embargo, tanto la Nacional como la privada aun no se nota que haya comprendido su importancia para crear el nuevo Paraguay.

En este despertar lento actual de la juventud y con la ayuda de hombres y mujeres adultos que lucharon por el paraguay desde los tiempos de la dictadura, la sociedad civil en general poco a poco se va despertando y comienza a vivir sus derechos de participación en la vida nacional que le da nuestra Constitución.

El IV Foro Social de las Américas en Asunción

En este sentido el cuarto foro social de América, que vamos a celebrar, puede convertirse en un hito importante para avanzar con mayor conciencia crítica, con mayor amplitud de horizonte y, sobre todo, con mayor unión entre nosotros los paraguayos y paraguayas y de todos los conciudadanos de este país con sus hermanos extranjeros que piensan lo mismo.

Repetimos lo del comienzo, estamos en un momento decisivo de nuestra historia en el que se ha iniciado un proceso hacia delante pero, desgraciadamente, tiene el riesgo de empantanarse o de retroceder. Esto puede ocurrir por el objetivo de los dos partidos políticos más numerosos, que solamente miran la consecución del poder de sus partidos y no el bien de todo el Paraguay. Y por supuesto, para el avance del proceso de cambio se necesitará una mayor participación de la Sociedad Civil Organizada. En especial de la juventud.