martes, 22 de septiembre de 2015

LO INVITAMOS, ¿SACAMOS PROVECHO?

     

 Cuando el Papa Francisco visita Cuba y los EE.UU., con  todo  respeto escribo estas líneas a mis hermanos en la fe.  El tema es el Papa Francisco en Paraguay.  Después de haberlo invitado con tanta esperanza y estado con él con tanto sentimiento de alegría y afecto   ¿quedó solamente  el influjo de todo esto ha quedado en un sentimiento noble y valiosísimo  o ha cambiado en mucho o en poco nuestras vidas? Sobre todo, teniendo en cuenta la riqueza encerradas en sus palabras y en su actitud ante todos los que lo rodeamos.
Repito lo que otras veces he dicho. Su venida fue una bendición de Dios. Por sus palabras y, sobre todo, por su actitud cristiana. Y en este sentido todos hemos sido bendecidos por Dios.
Pero, todavía me queda una duda.
¿No sería  provechoso que entre todos los católicos en unas jornadas a lo largo y ancho del Paraguay reflexionáramos sobre algunos puntos esenciales tratados por el Papa Francisco, con los cuales los obispos del Paraguay formaran un  buen plan de pastoral en el que tuviéramos un horizonte de trabajo para ponerlo en práctica, que sería evaluado en su realización cuando se cumpliera un año de la visita del Papa Francisco en julio del 2016?
Con capítulos teóricos y de práctica sobre aspectos tan esenciales como los pobres y la pobreza, la juventud, la clase política que tenemos, influencia del neoliberalismo en el Paraguay, el testimonio sacerdotal y religioso, los bañadenses,  la Fe de nuestro pueblo etc…
La Conferencia Episcopal Paraguaya nos haría un gran servicio  como Pueblo creyente, en estos momentos difíciles en que estamos.

Acabo con una palabras de Francisco “Es admirable el tesón y el espíritu de superación del Pueblo paraguayo para rehacerse ante tanta adversidad y seguir esforzándose por  construir una Nación próspera y en Paz” (Ante las autoridades en el Palacio de López).

1 comentario:

  1. Que mi reconocimiento (de un nadie) subraye las palabras del Papa Francisco y la propuesta de Pai Oliva
    Que así sea.

    ResponderEliminar