Islandia, 400.000 habitantes en una inmensa isla, se ha levantado contra el sistema de castas financieras, profesionales o políticas y ha puesto en primer lugar al ciudadano común, que había sido expulsado de los procesos del país.
El año 2.008 la moneda se desplomó e Islandia cayó en bancarrota. Al año siguiente la población se levantó (primera edición de los “indignados”) contra el gobierno y provocó su renuncia. El siguiente gobierno quiso obligar a que el Pueblo devolviera la deuda externa de 3.500 millones de euros con Gran Bretaña y Holanda y que los ciudadanos la fueran pagando durante los próximos 15 años.
La gente se echa a la calle y solicita un referéndum, Este con el 93% a favor rechazó el pago de la deuda.
Y, como en el fondo, los culpables de esta ruina habían sido los banqueros , la justicia ha actuado sobre ellos y altos ejecutivos.
En este contexto de crisis una asamblea de 25 ciudadanos, sin partidos políticos, está estudiando la redacción de la futura Constitución.
Lo ocurrido en Islandia ha sido considerado por los líderes políticos europeos como un mal ejemplo a ser censurado. Y un boicot informativo ha caído sobre el País.. No se habla , ni se informa sobre Islandia. El poder político europeo no soporta que un Pueblo pequeño se haya atrevido a contradecir a todo el sistema. Como ocurrió al Paraguay en el siglo XIX.
jueves, 17 de noviembre de 2011
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