EE.UU y la Unión Europea parece que eligieron lo primero en Cancún. Repitieron su actitud de Copenhague y el resultado fue nulo. Palabras, promesas, pero ningún compromiso concreto..
En Cancún cinco países lucharon en defensa de la humanidad que está amenazada y en defensa de los países pobres que con menos defensas son los que sufrirán las peores consecuencias: Venezuela, Bolivia, Ecuador, Cuba y Nicaragua. ¿Por qué no tuvo esta actitud decidida Paraguay?. La sociedad civil necesita saberlo.
En el fondo sucede que el sistema capitalista no puede frenarse. Si lo hace otra empresa ocupará su lugar y arruinará a la primera. El sistema capitalista es como las primeras bicicletas sin “piñón” que había que pedalear siempre o caíamos al suelo.
En Cancún cinco países lucharon en defensa de la humanidad que está amenazada y en defensa de los países pobres que con menos defensas son los que sufrirán las peores consecuencias: Venezuela, Bolivia, Ecuador, Cuba y Nicaragua. ¿Por qué no tuvo esta actitud decidida Paraguay?. La sociedad civil necesita saberlo.
En el fondo sucede que el sistema capitalista no puede frenarse. Si lo hace otra empresa ocupará su lugar y arruinará a la primera. El sistema capitalista es como las primeras bicicletas sin “piñón” que había que pedalear siempre o caíamos al suelo.
En este sentido el capitalismo seguirá dañando el clima hasta destrozarlo. Se figuran los más poderosos que podrán irse a otro planeta dejando a la tierra muerta. Egoísmo delirante.. Inclusive en esta agonía del planeta están descubriendo nuevos negocios como hacer diques en las costras cuando el mar suba seis metros o el crear nuevas aseguradoras para resarcir las muertes y daños cuando sean generalizados.
Cuando celebramos la Navidad, con firmeza repetimos que más importante es que vivamos todos en la Madre Tierra que el ganar plata unos pocos destruyèndola.. Y esto nos enseñó Jesús de Nazaret.
Cuando celebramos la Navidad, con firmeza repetimos que más importante es que vivamos todos en la Madre Tierra que el ganar plata unos pocos destruyèndola.. Y esto nos enseñó Jesús de Nazaret.
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