viernes, 28 de noviembre de 2014

CUANDO LAS HORAS DECISIVAS HAN PASADO



“Cuando las horas decisivas han pasado, es inútil correr para alcanzarlas”, estas palabras del gran dramaturgo griego Sófocles pueden repetirse ahora en el Paraguay.
Estamos viviendo momentos decisivos. Además, con la sospecha de que nos llevan hacia donde  no queremos. Y con la sensación de que los poderes fácticos actuales tienen como colonizado a esa mayoría de los paraguayos y paraguayas a las que popularmente llamamos “el Pueblo”.
El actual gobierno ha hecho una  opción por los que tienen plata, seguramente por aquella falacia del vaso que rebosará cuando se llene. Que la  plata cuando abunde se redistribuirá naturalmente  entre  todos. Un fenómeno todavía inédito.
Esto nos  está llevando a endeudarnos  por muchos años, cosa que se podría evitar con impuestos progresivos a los  200 millonarios que tenemos y a las multinacionales que acuden al festín.
Estos días ha surgido el cambio de  miembros de la Corte suprema de Justicia. ¿Por qué ahora y no antes? Tenemos la sospecha que es para fortalecer al Ejecutivo con personas más unidas a él. Si se rompe la independencia de los tres poderes, entramos en dictadura. Y esto ya ha comenzado con el Legislativo.
Los transgénicos son el mayor  poder económico del Paraguay en acción. Nos pueden conducir a una ruptura interna del país con  pérdida de territorio nacional. Estos días hay un confuso problema de retención, como rehenes, de campesinos por   sojeros extranjeros. Puede ser el  comienzo de algo muy grave. Tanto así como si se da a la inversa.
La represión de las fuerzas conjuntas de militares y policías está dando muerte a personas a todas luces inocentes. Esto, o se detiene con castigos ejemplares, o va a comenzar una espiral de grande violencia estatal.
He señalado solamente algunos aspectos. En todos ellos repito la frase de Sófocles: “Cuando las horas decisivas han pasado, es inútil correr para alcanzarlas”.
 Todavía estamos a tiempo

No hay comentarios:

Publicar un comentario