El
viernes 9 de mañana hubo una
manifestación de las esposas de los 20 crucificados de la Línea 49 delante del
Ministerio de Trabajo y pidieron, en una
entrevista, al Ministro que solucionara de una vez este problema que hacer
sufrir desde hace ciento ocho días a sus esposos crucificados y que no tienen
entradas económicas para alimentar a sus hijos.
El Ministro dijo que habría una tripartita hoy
lunes 12 a las diez de la mañana, aunque no aseguraba
que el diputado dueño de la empresa estuviera presente.
Un
rayo de esperanza para estas familias cuyos padres está crucificados, existe una
madre también crucificada acompañando a su esposo y para los otros obreros que
también por querer formar un sindicato fueron despedidos.
Estamos
ante un desafío de humanidad del Presidente Cartes y de su ministro. También
del diputado Celso Maldonado como dueño de la empresa.
Todos
los afectados celebran la noche del
domingo una vigilia y piden a Dios su ayuda para que termine satisfactoriamente
este problema. Son gente muy creyente a la que
diariamente el P. Juan Carlos, franciscano les celebra la Eucaristía.
Existen dos problemas.
Uno
es que se cumplieron los trámites para formar el sindicato que según el artículo 96 de la Constitución que son que quieran formarlo, sin necesitar una
previa autorización, y que lo presenten en el
Ministerio de Trabajo para que lo registre. Todo esto se ha hecho y el
Ministro de trabajo lo ha encajonado. Pone como condición que se vayan de la
acera donde están crucificados y que luego otro día se lo daría. Los
crucificados quieren que sean simultáneamente ambas cosas. No se fían.
El
otro es que sean recibidos en la empresa ya que
formar un sindicato no está penado por ninguna ley laboral.
Ojalá
haya humanidad en el Presidente Cartes y su
ministro y en el diputado
empresario.
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