“La Democracia está en
peligro tras una clase desvinculada de
la suerte del resto de la sociedad y compuestas por las altas finanzas, las
empresas multinacionales y algunos gobiernos.
¿Y,
para quien gobierna? No
gobierna para la gente y sí para los mercados Financieros.
Las
últimas huelgas en España no han tuvieron éxito. La gente tiene miedo de perder
su trabajo. Comprendo ese miedo porque el miedo es la disciplina que la
sociedad capitalista emplea para dominar
a la población.
Con
miedo son como “ratas de laboratorio” para ver que nivel de castigo y
sufrimiento pueden ser aceptados por esas sociedades sin que la gente se
rebele. Y esto puede alentar al Fascismo de los que están en el poder.
Algunos
piensan que la lucha de clase esta acabando y los ricos la están ganando.
Warren Buffer, la tercera fortuna del mundo, ha dicho: “Hay una guerra de
clase, pero es mi clase, la de los ricos, y
la estamos haciendo y ganando”.
Hasta
aquí las palabras de Susan George.
¿Un
ejemplo de esto en el Paraguay?.
En
el mes de noviembre, acompañamos, en vigilia permanente delante de la Fiscalía General
de la República,
recordando a los cuatro de Curuguaty, que hacían huelga de hambre.
Una
noche a las 4 de la madrugada la policía
y la FOPE con gas pimienta, garrotazos y balines de
goma y llevándose todo lo que teníamos, experimentaron con nosotros como con “ratas de
laboratorio”.
Temían
que, si morían los huelguistas, una muchedumbre se levantaría. Y quisieron
saber nuestra reacción ante la represión.
¿Nuestra
reacción?: ese mismo día, después del juicio ético al Parlamento, una
muchedumbre marchó hasta la Fiscalía General.
Unidos y yendo al mismo lugar repetimos la denuncia.
No consiguieron dominarnos por el miedo
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