En
esa fecha habrá triunfado, si no lo
impide el Pueblo, toda la estrategia bien pensada para volver al año 62 de
gobierno del partido segunda columna de apoyo ( la primera era el
ejército) del dictador por 34 años y el
que hizo crecer con la falta de ética en su cúpula, la corrupción en nuestro país durante la transición.
Con
el golpe de estado parlamentario del
viernes 22 de junio del 2012
interrumpieron el camino de la democracia hacia el Cambio y pusieron un gobierno, títere, para que
cuanto más actúe más se desacredite y
menos impedimento le ponga al otro partido.
Ya comenzaron
los hechos de desaciertos como la permisión de transgénicos en el algodón,
la soja y el maíz; los intentos de la
firma del contrato con la
Rio Tinto Alcan; la
instauración del servicio militar o
civil obligatorio; los despidos masivos
por motivos de color partidario de
funcionarios del estado; los millones
de créditos a sojeros y ganaderos; la
defensa de la indefendible matanza en Curuguaty, etc…. Cuanto más se muevan más se
desacreditarán en beneficio de su único contrincante.
Elecciones
apoyadas por la Corte Suprema
de Justicia y por el tribunal Superior
de justicia Electoral que impondrán, como siempre, sus reglas. En los 61 años
de dominio colorado no se logró condenas para los centenares de miles de votos comprados por los partidos tradicionales.
Ahora,
el complemento definitivo al golpe de
estado será en abril del 2.013, esta vez
de tipo electoral, que nos hará volver al pasado para olvidar toda la voluntad
de Cambio.
Y
esto será posible si llegamos a esa fecha dominados culturalmente por el fatalismo,
psicológicamente por el miedo, económicamente por el consumismo, políticamente
por la compra de votos y atados legalmente por contratos irreversibles como el
Río Tinto Alcan.
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Este es también el momento en que los sectores que apuestan por un mundo más justo y una realidad paraguaya decente y equitativa demuestren su voluntad de cambio y opongan al reaccionarismo de los partidos tradicionales figuras de sólida formación política y ética insobornable, capaces de llevar adelante proyectos de trascendencia para nuestra patria, con plena participación de las bases.
ResponderEliminarMe honra pertenecer a un Partido que responde a lo que sugieres Miguel Angel Fernandez: gente decente, honorable, equitativa con una plena voluntad de cambio en la misma praxis (modus operandi)de la verdadera política que es el SERVIR A LA CIUDADANIA.
EliminarEn el Partido Blanco, desde el lunes salimos a la arena política (no la politiquera) a presentar nuestras caras, nuestro proyecto de gobierno tanto desde el Ejecutivo como desde el Parlamento.
¡El pueblo unido puede vencer a sus enemigos e instaurar una verdadera democracia social!
ResponderEliminarLa única esperanza que quedaría para abril es la Izquierda, pero están cometiendo más errores que los tradicionales partidos. Y muchos de sus partiditos están llenos de corruptos a los que no quieren dejar de lado. Es hora de unirse, de separar a los impresentables y de anteponer el país al partido. Es hora de aprender de la historia y MIRAR A LARGO PLAZO... Gracias por sus reflexiones Pa'i
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