Una mayoría grande de la ciudadanía considera
necesario este juicio por mal desempeño de las funciones y prevaricato. Juicio
que tiene que ser votado en la cámara de Diputados y enviado al Senado. La
Honorable cámara de Diputados haría de acusadora y el Senado de Juez.
El mal desempeño de las funciones se refiere a actos
que perjudican el servicio público, deshonran al país o a la investidura
pública, impiden los derechos y garantías de la Constitución¨. Esta acusación
¨deriva de un conjunto de circunstancias, de un conjunto de detalles que rodean
al funcionario y forman la conciencia plena¨
En cuanto al prevaricato, el código penal Paraguayo en
su articulo 305, numeral 1, castiga este delito con pena privativa de libertad
de hasta 5(cinco) años y los definen los siguientes términos ¨…el juez, árbitro
u otro funcionario que, teniendo a su
largo la dirección o decisión de algún juicio jurídico, resolviera el derecho
para favorecer o perjudicar a una de las partes…¨comete el delito de
prevaricato.
Los ministros enjuiciados son: Víctor Núñez, Oscar
Bajac, Sindulfo Blanco, Alicia Pucheta, Cesar Garay, Raúl Torres y Antonio
Fretes.
Sobre este tema la ciudadanía ha celebrado dos
sesiones en la sala Bicameral. La primera estudiándolo jurídicamente. La
segunda en forma de juicio en la que salieron condenados.
Claramente la justicia no funciona en el Paraguay. Es
morosa y los juicios se encajonan. Discrimina descaradamente a los pobres,
únicos habitantes de Tacumbú. Las sentencias a favor dependen de la plata que
se paga o de la pertenencia a un grupo. En los niveles más bajos se cobran
coimas por la aceleración de los expedientes solicitados.
La Corte Suprema de Justicia conoce todo esto y no ha
sabido o querido suprimir esta corrupción. Y, para colmo, se autonombró
inamovible hasta los setenta y cinco años.
Por todo esto, la ciudadanía exige su juicio político.
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